Consejos Para Mantener la Piel hidratada

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Dra. Fátima Agüero

Dra. Fátima Agüero

Médica Dermatóloga. Prof. Asistente - Catedra de Dermatología - Facultad de Ciencias Médicas. Universidad Nacional de Asunción. Becaria de Perfeccionamiento en Dermatología estética y laser, Hospital Italiano de Buenos Aires - Argentina. Directora Médica de Dermalaser Paraguay. Past President Sociedad Paraguaya de Restauración Capilar. Presidenta de la Sociedad Paraguaya de Dermatología. Secretaria de Comunicación. RADLA 2021. Miembro de la Academia Americana de Dermatología, del Colegio Ibero latinoamericano de Dermatología, entre otras Sociedades Científicas de prestigio.

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Existen varios motivos por los cuales uno puede tener la piel seca como por ejemplo: el clima (ya sea un calor poco húmedo o un frio seco), el uso de productos muy agresivos para ella como detergentes, ácidos, agentes corrosivos, alcohol (hoy instaurado en nuestro día a día), el lavado frecuente, alteraciones hormonales (por ejemplo el hipotiroidismo) o genéticas, ciertos medicamentos e inclusive la edad misma.

Asimismo, ciertas conductas se pueden aplicar a la rutina diaria para mantenerla en buenas condiciones e hidratada:

* A la hora  del baño utiliza agua tibia, no caliente, el baño debe ser corto, de pocos minutos y prefiere  limpiadores suaves como los sustitutos del jabón conocidos como syndets ( los hay de varias marcas) o aquellos con pH ácido ( como los de higiene íntima femenina) según tu tipo de piel, ellos evitarán retirar de la superficie de tu piel el manto hidrolipídico que es una barrera que la  piel produce para defenderte de agresiones y evitar la evaporación de agua que trae como consecuencia la deshidratación. No utilices cepillos ni esponjas.

* Puedes exfoliarte 1 vez a la semana como máximo y con productos suaves, no muy abrasivos e indicados para tu tipo de piel. La exfoliación retira las células muertas y ayuda a que se absorban mejor los productos que se aplican luego.

* Tras el baño, al secarte, hazlo con una toalla de algodón (evita las telas ásperas o sintéticas) y seca con palmaditas suaves, sin frotar.

* Aplícate la crema o loción hidratante cuando la piel todavía sigue algo húmeda justo después del baño, este es el momento ideal para lograr la mejor hidratación. Hay muchas cremas y lociones hidratantes en el mercado, tanto para rostro como para cuerpo, pero los componentes que contengan determinarán su potencia hidratante: algunos captan agua del exterior como el sorbitol, la glicerina, la urea o los alfa hidroxiácidos, mientras que otros previenen la pérdida de agua por oclusión, formando una barrera: la lanolina, siliconas, óxido de zinc y aceites minerales. También existen emolientes que restauran el espacio entre las células del estrato córneo (la capa más externa de la piel) como los ácidos grasos, el colesterol, el ácido hialurónico y el escualeno.

* La elección del tipo de producto también va a depender de cada persona y la zona a tratar: por ejemplo, en el rostro las personas de piel grasa van a preferir geles o serums y aquellas de piel seca van a optar por cremas mientras que para zonas muy secas de la piel como los talones los ungüentos o pomadas son más efectivos.

* Puedes repetir la Hidratación más veces durante el día, y de noche puedes elegir productos más pesados, con altas concentraciones de urea o con ácido glicólico o láctico que potenciarán los resultados.

* El sueño juega un papel fundamental en la recuperación de la función del sistema inmunitario y la función de barrera de nuestra piel y las mucosas, de ahí la importancia de dormir al menos 8 horas.

* También es importante recordar que debemos nutrirla desde adentro consumiendo alimentos ricos en proteínas, vitaminas, antioxidantes y ácidos grasos que nuestro cuerpo necesita para formar nuevas células y mantener nutrida nuestra piel.

* No olvides beber, aunque sea 1,5-2 litros de agua diariamente para mantenerte hidratada y reducir en lo posible aquellas bebidas con gas o alcohol ya que éstas deshidratan la piel.

* El tabaco y la exposición a humos y polvo también la deshidratan.

* La Radiación ultravioleta ( RUV) proveniente del sol o de las camas y duchas solares no solo aumenta el riesgo de desarrollar cáncer de piel y acelera su envejecimiento  sino también la vuelven más opaca y deshidratada ya que altera la función de barrera de nuestras células y las vuelven menos efectivas en su función de retener agua, de renovarse y de producir colágeno, ácido Hialurónico y muchos otros componentes responsables de la calidad e hidratación de la misma así que evita la exposición al sol en los horarios de RUV más alta ( entre las 11 y las 15 hs ) y utiliza protectores solares o ropas y gorros que te protejan cuando estás expuesto.

La piel es el órgano más extenso que tenemos así como también es nuestra primera barrera de defensa ante la agresiones y es por eso que es importante mantenerla sana e hidratada en todo momento cuidándola tanto desde afuera como desde adentro, si a pesar de estos cuidados seguís sintiéndola seca o deshidratada, no dudes en consultar con un dermatólogo, el médico especialista en el cuidado de la piel.